Meditación

Es un momento de amor bondadoso en donde tú estás incluido, al igual que todos los demás. Medita inicialmente por ti mismo y para ti mismo amor, paz y felicidad. Deseo que mi cuerpo y mi mente se encuentren bien. Deseo para mí estar libre de ira y rencores. Veo a través de mis ojos la comprensión y el amor y en ellos me acojo. Al igual que te acojo a ti. Tengo sólo amor para mí, para ti.

Comienza este camino dando un primer paso y observando que, como en todo camino, siempre habrá dificultades y tropiezos, siendo todos ellos franqueables; razón fundamental para continuar aceptando lo que no puedes cambiar, construyendo sobre lo que puedes trabajar y entrando en armonía con todos los que de una u otra manera hacen parte de tu entorno.

Asume una postura recta, los hombros relajados, endereza tu columna sin tensarla demasiado. Con la rectitud de una montaña firme y equilibrada, tus manos sobre las piernas. Relaja tu mandíbula, tu entrecejo, tus labios, tu lengua. Entrecierra tus ojos dejando pasar un haz de luz, apenas percibiendo el exterior sin identificar las formas. Comienza respirando profunda y lentamente. Siente el aire bajando por tu cuerpo. Al exhalar suelta todo malestar incomodidad. Respira profundo y lento, sintiendo que tu cuerpo se llena de luz, de energía y frescura. Al exhalar suelta toda la tensión y el estrés. Deja que todo retorne a su estado natural. Respira una vez más profundo y lento, iluminando tu mente con el aire que entra en tu cuerpo y al exhalar, suelta recuerdos del pasado, proyectos del futuro, manteniéndote en el presente…

Este vídeo es una introducción a la meditación como puerta de entrada a la Conciencia Plena (Mindfulness), que se basa en la filosofía budista conocida como Vairochana o Postura del Buda, que facilita la correcta respiración unida a la correcta circulación sanguínea (Prana o energía vital). La Postura corporal de 7 puntos del buda Vairochana se considera la postura óptima (Prana) para la meditación. Te explicaré en qué consisten y cómo llevarlos a la práctica

Cierra los ojos y comienza respirando tres veces. Inhala profundo y lento. Con cada inhalación siente cómo llenas tu cuerpo de aire limpio y claro. Con cada exhalación siente cómo vas soltando recuerdos del pasado, proyectos del futuro. Nada es más importante que disfrutar de este momento presente. Inhala profundo y lento. Exhala profundo y lento.

Comienza respirando profundo y lento tres veces. Con cada inhalación permite que el aire entre suavemente y con cada exhalación suelta cualquier tensión mental o física que observes. Contempla cuál es tu postura y relaja suavemente toda la tensión que tengas acumulada. Observa si hay preocupaciones y pensamientos futuros y libérate de ello, en este momento. Contempla tus manos y tus brazos, al igual que el sitio donde te encuentras en este momento. Cambia de postura. Inhala suavemente y exhala acompañando esta exhalación con un pensamiento de tranquilidad y sosiego. Observa sin juicios tu alrededor. Inhala y exhala suavemente. Contempla la fortaleza que tienes y la capacidad de regresar al sitio en donde debes estar. Agradece por este momento y emprende de nuevo tu actividad.

Hago conciencia del lugar en donde me encuentro ahora. Adopto una postura cómoda. Respiro tres veces. Observo cómo se encuentra mi cuerpo. ¿Qué estoy pensando? ¿Qué estoy sintiendo? ¿Cuál es la emoción que me embarga en este momento? ¿En qué me estoy enfocando? Respiro una vez más, profunda y lentamente. Me ubico en el aquí y en el ahora. ¿Me observo a mí mismo/a. A qué me estoy acercando? Acudo a mis valores. Me apego a ellos. Respiro una vez más, lenta y profundamente. Si lo que estoy pensando, si lo que estoy sintiendo, si la emoción que estoy experimentando, no están acorde a mis valores, los abandono. Continúo con mi día…

Para. Detente haciendo conciencia ahora: ¿Dónde estás? ¿Con quién estás? ¿Dónde está la otra persona que te habla? ¿Qué notas? ¿Qué observas de ella? Si no hay nadie y tan solo es un momento difícil o complejo… Piensa y acércate al momento presente. Observa tu estado interno, evaluando tus emociones, sentimientos, sensaciones corporales ¿Qué estás pensando? ¿Qué estás sintiendo? ¿Dónde está tu atención? ¿Cuáles son tus valores que ahora te acompañan? ¿Qué es importante en este momento? ¿Cómo puedes actuar con tus principios éticos? Respira profunda y lentamente. Siente el aire moviéndose por tu cuerpo. Permite que tu cerebro se acomode al contexto. Siente el oxígeno entrar a tu torrente sanguíneo y viajar hasta tu cerebro. Ahora logras calma mental. Logras que se aclare tu mente. Ubícate en una postura corporal tranquila…

“Todo cuanto existe en el universo y más allá, se contiene en otro elemento y/o en otro sujeto y así, de la misma manera, hace parte de un todo, creando una cadena irrompible. Interdependencia”. Marijully

Elementos que uso:

– Una manzana de cualquier color.

– Un cuchillo.

Me siento en una silla y enfrente ubico una mesa y sobre ella, pongo una manzana. No comento. No relato lo que veo y por ende no le doy caracterización alguna a esa manzana. Tan solo entro en meditación de una manera sencilla y simple; tan solo observo. Me encuentro frente a una manzana. Observo detenidamente su corteza. Su color. Su tamaño. Veo que se encuentra cerca a mí. Miro detalladamente sus manchas. Su brillo. Giro la fruta y me detengo en la sombra que proyecta con relación a la luz que la cubre. Su pedúnculo y su ombligo. Observo su redondez. Parto la manzana y percibo su aroma. El jugo que brota del interior de ella. Sus semillas y el color que tienen. El centro y los bordes que se fusionan con la cáscara…

“Si camino contigo me siento acompañado, pero si lo hago solo me encuentro con mi propia compañía” Marijully

Ahora me hallo conmigo mismo. Es un encuentro íntimo y placentero. Comienzo a caminar y los pasos que doy, me alejan del punto de partida, pero me acercan a mi interior. Me relaciono con el ruido que hacen mis zapatos, rozando contra la superficie sobre la que me desplazo. Me entrego al ritmo propio de mis piernas balanceándose y mis pies que las sostienen. Inhalo profundamente la brisa que me rodea en el silencio y al hacerlo siento como se llena de aire claro y limpio, todo mi cuerpo. Exhalo profundamente y al hacerlo, siento que me libero de tensiones y preocupaciones del pasado y expectativas del futuro. Me entrego a sentir el suelo bajo mis pies. Cuento los pasos desde uno hasta llegar a diez y al hacerlo inhalo y exhalo, agradeciendo a la existencia misma por tener la fortuna de contar con ellos. Vuelvo a contar desde uno hasta diez. Observo mis pies y les sonrío. Les agradezco el servicio que me prestan por llevarme de un lugar a otro. Que me acompañen a donde quiera que haya necesitado o querido. Inhalo y exhalo nuevamente, dejando que mi cuerpo respire a su ritmo.

Vamos a empezar con tres respiraciones lentas y profundas, relajando el cuerpo. Respiraciones abdominales inhalando aire por la nariz y al exhalar soltamos y relajamos todo el cuerpo. Inhalaciones cómodas a nuestro propio ritmo. Al exhalar soltamos el aire junto con toda la tensión, toda la rigidez que tenemos en el cuerpo. Inhalamos aire profundo y lento y al inhalar sentimos que tomamos luz blanca, una luz sanadora y refrescante y al exhalar sanamos y relajamos todo nuestro cuerpo. Relajamos las zonas especialmente tensas como el entrecejo, los hombros y la mandíbula…

Cierra los ojos y comienza respirando tres veces. Inhala aire profundo y lento. Con cada inhalación, siente cómo llenas tu cuerpo de aire limpio y claro. Con cada exhalación siente cómo vas soltando recuerdos del pasado. Proyectos del futuro. Nada es más importante que disfrutar de este momento. Inhala profundo y lento. Exhala profundo y lento. Inhala una vez más, aire limpio y claro. Exhala dejando que tu mente permanezca aquí. Relaja tu cuerpo. Tan solo disfruta. Mente y cuerpo unidos. Relajados…

“La belleza del comienzo del día depende del lente con el que sea mirado”

Marijully

Comienza respirando lenta y profundamente tres veces. Con la Primera inhalación, siente cómo llenas tu cuerpo de paz y plenitud. Al exhalar, siente cómo vas liberándote de tensiones. Con la segunda inhalación, siente cómo vas soltando pensamientos del pasado. Proyectos del futuro. Al exhalar ve liberándote de preocupaciones. Con la tercera inhalación entra en comunión cuerpo y mente. Con la tercera exhalación, siente cómo te encuentras liviano/a y tranquilo/a.